miércoles, 22 de octubre de 2008

Felipe Calderón, Espurio

Luis Ulises Vera Romero
UAEMéx
Mesa de opinión-23 Oct 08

A poco de  mas de dos años, Felipe Calderón Hinojosa ha sufrido una batalla con la sociedad que aún no puede resolver: su gobierno no se ha podido legitimar. No es gratuito que en lo que lleva de su administración la sociedad mexicana sigue hambrienta de justicia, empleo y progreso para los mexicanos más jodidos . De lo único que sabemos de su  mandato han sido sólo números, cifras de militares y civiles muertos provocados por una falta de planeación en sus estrategias de seguridad en el combate contra el crimen organizado.  Lo qué denunciaba como peligro para México, a Andrés Manuel López Obrador, y de lo que pasaría si el Peje hubiera llegado a la presidencia, ahora lo estamos viviendo con él: crisis, inseguridad e incapacidad para gobernar.  

El pasado 15 de Septiembre, la ciudad de Morelia vivió una de las primeras expresiones de terrorismo en el país, donde el crimen organizado no mató intencionalmente a más de una docena de civiles cuando daban el grito de independencia, sino donde el narcotráfico se dejó ver con más fuerza que los responsables de la seguridad del país. Esta acción refleja la mala decisión que tomó Calderón durante su gobierno: romper relaciones con el narcotráfico. No quiero mostrarme a favor ni de los zetas, ni  con el cartel de Sinaloa ni con la familia ni con nadie, solo pretendo decir que los vínculos que el Estado tenía con ellos no tenían que haberse roto así, de tajo. Las consecuencias ahora las vivimos todos.

No hay seguridad. El vivir en un estado de inseguridad es privarnos de un derecho que  todos tenemos: el de la paz. Los medios masivos de comunicación más importantes del país nos hablan de la delincuencia que se vive a diario , de los litros de sangre derramada, de las miles de balas disparadas, de robos, de secuestros etc., y pareciera que sólo hablan de estos temas. Ellos deciden que información mostrar y que no, también, se muestran esas noticias porque precisamente eso es lo que pasa en el país: violencia.

Pasados más de dos años de un gobierno que inició forzado aún no se ve progreso. Desde el momento en que Calderón toma la banda presidencial entre gritos, empujones, desesperación y temor, desde ese instante nuestro país ha estado en manos de alguien que no sabe gobernar, como un niño con billete en mano y no sabe qué hacer.

La reforma energética ha sido una de las campañas mas comprometedoras en este gobierno panista, y que no ha podido aprobarse porque los intereses de toda la bancada parlamentaria aún no firman y lo dejan con copias para… todos, (con eso de que ya no se sabe que partido es más tranza que el otro). Esta reforma propuesta por el ex secretario de energía en la sesión de Vicente Fox, busca la inversión privada en PEMEX, que por más acuerdos a los que se lleguen, en los que se “respetará la autonomía de Petróleos Mexicanos”, se estaría violando a la constitución, y desde su lecho de muerto, Lázaro Cárdenas estaría con ganas de resucitar y dotar de unos cuantos coscorrones al actual mandatario.

El gobierno calderonista no se legitima porque los resultados de las acciones que ha tomado han sido desacreditadas por gran parte de los mexicanos que inconformes-con justa razón- repudian que se esté viviendo en un México tan débil, tan vulnerable, tan sólo e inseguro. 

Para que un gobierno pueda legitimarse debe hacer y saber hacer lo que los mexicanos queremos, no que suponga aquello que necesitamos, y desperdicie material humano y financiero en acciones que no llevan a ningún lado al país.

Otra de las cosas que FECAL ha hecho para mandar en picada su gestión ha sido la mano dura y represora a quienes se manifiestan en actos públicos en contra de él, como fue el caso de Andrés Leonardo Gómez Emilsson, estudiante mexicano del bachillerato en Noruega,  quien gritara “Espurio” a Felipe Calderón en la entrega del Premio Nacional de la Juventud 2008. En este acto miembros del estado mayor presidencial condenaron el acto y lo remitieron al Ministerio Público, por una razón que no amerita tal represión: gritar “Espurio” al presidente. 


Pero este no ha sido el único caso de represión en el que la seguridad del presidente arremete contra manifestantes que se expresan sin ninguna forma de violencia física; basta escribir los campos Calderón-Fil-2007 en el buscador de videos Youtube, para encontrar en el primer video resultado de la búsqueda, imágenes del 24 de Noviembre de 2007, cuando en la inauguración de la Feria Internacional del libro en Guadalajara, una mujer grita: “Felipe Calderón, eres  un presidente espurio”, inmediatamente dos agentes sacan de forma rápida y violenta a la manifestante, mientras que el maestro de ceremonias inicia rápidamente la ceremonia, para que el público presente no volteara a ver lo que ocurría con los agentes y la mujer . 

Basta seguir viendo los videos relacionados al tema que aparecen en la búsqueda de este portal de videos, en los que los manifestantes son sometidos con todo el rigor de un poder que solo es legitimado por ellos mismos, y que se asumen como una autoridad total, capaz de reprimir cualquier forma de expresión en contra de Felipe, y que representa un derecho de libertad de expresión fraguado, reprimido.

Felipe Calderón no se ha legitimado como “Presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos”; los medios y la sociedad lo reconoce como el presidente espurio, FECAL, el presidente, pero nunca se le reconoce como el papel que está ocupando, y si desde este primer momento, que es el de reconocer al presidente no se le hace, entonces cómo pretende esperar que los mexicanos aceptemos las torpezas que hace.

Sin duda alguna Calderón no ha sabido gobernar, y lo único que le resta hacer para salir con un poco de dignidad es matarlo. Quizás esta muerte que propongo al presidente no debería ser tomada literalmente, lo que puede hacer Calderón es esconderse y hacerse pasar por muerto. Esta es la única solución viable en la que él y todos los mexicanos saldríamos ganando. Sin embargo la duda sigue: ¿aún con la desaparición de Calderón, el próximo presidente solucionaría los conflictos del país?, o ¿será acaso que la conciencia social-basada en educación para todos- es la medicina más cercana que sane las heridas de nuestro México?. 

No hay comentarios: