martes, 16 de septiembre de 2008

Cuando un movimiento social de protesta surte efectos.


A veces, cuando la sociedad se organiza adecuadamente, se pueden lograr cosas interesantes.
Jesús Filiberto Trinidad Pérez
UAEMex
Nota informativa y mesa de debate 
16 Sep 08

Ahí les va la historia (o chisme, como quieran llamarle).

Resulta que el martes 9 de septiembre, integrantes de la Unión de Comerciantes Ambulates y Tianguistas 5 de Mayo (UCAT) y la Organización de Comerciantes "Mártires de Río Blanco" recibieron un comunicado por parte de sus dirigentes en el que se les convocaba a realizar una marcha el día jueves 12 de septiembre para protestar en contra de la iniciativa del delegado en Iztapalapa Horacio Martínez Meza (de extracción perredista) de !desalojar a todos los comerciantes ambulantes de la demarcación (la más poblada del Distrito Federal).

Aunque en un primer momento se manejó como que se erradicarían todos los tianguistas de toda la ciudad, después se supo que era una cuestión (casi personal) que el jefe delegacional trae atravesada, pues se habla de un pacto con los dueños de empresas constructoras de centros comerciales y operadoras de tiendas de autoservicio, con las que se tienen pactos desde hace ya mucho tiempo en los cuales se ha establecido el acaparamiento de clientes por parte de este tipo de empresas. Sin embargo, se supo el motivo real de la marcha: Se planeaba desaparecer dos tianguis en la delegación. Uno de la UCAT 5 de Mayo y otro de la "Mártires de Río Blanco".

Por lo que el jueves 11, se dieron cita los integrantes de estas dos organizaciones y desde distintos puntos de la delegación iniciaron las marchas que finalizarían en la explanada de Iztapalapa. Al llegar a la plaza principal y desquiciar el tráfico de la zona oriente de la ciudad y ver la nula respuesta de las autoridades, los ambulantes decidieron bloquear la avenida Javier Rojo Gómez. Una vez que un funcionario habló con los dirigentes y se llegó al acuerdo de que no sucedería lo planeado, es decir, mover a los tianguistas.

Ahora, habrá que esperar a que se cumpla lo pactado con el gobierno delegacional, pues la rapidez de la transformación del conflicto me parece hasta cierto punto sospechosa. Me da pie a pensar que cualquier día que se les antoje, los funcionarios de vía pública impedirán a los trabajadores ocupar la calle y no permitirles a los tianguistas ponerse. Así sin más y lo creo por que ya lo han hecho en ocasiones anteriores.

Fue numerosa la asistencia de los comerciantes de tan sólo dos organizaciones, probablemente haya habido una concurrencia cercana a las 500 personas y eso que nada más se dieron cita dos de las muchas organizaciones que existen en la delegación por lo que se podrían tener mucho más asistentes si es que el conflicto creciera.

Esto fue una demostración a lo que cualquier instancia de gobierno, se expone si llegará en algún momento, a querer llevar a cabo el primer rumor que se soltó al interior de las redes de comunicación de las organizaciones de tianguistas. Erradicar al tradicional mercado sobre ruedas.

Solamente hay que cuidar algunos aspectos. El movimiento debe ser pacífico (por que en el de hoy hubo algún brote de incitación a la violencia) y sin afán de molestar a la ciudadanía pues no se debería pretender que la gente sólo los considere como revoltosos provocadores de desmadre que no tienen nada mejor que hacer, en lugar de percibirlos como un grupo que lucha por sus derechos.

Esta vez, surtió el efecto esperado, habrá que cuidar que no se reviertan y dificulten las cosas porque el tianguis es el sustento de miles de familias y a partir de el tianguis se han construido historias de vida que han permitido a mucha gente tener un mejor futuro. No pueden arrebartarles la existencia, sólo por que sí y por pactos mercantilistas que, a la larga, afectará a mucho más gente de la que podemos imaginarnos.

Del jijo del Horacio Martínez, hablaremos después.

Mientras, disfruten sus fiestas de reafirmación de identidad nacional. 


FOTO: http://www.terragalleria.com/images/mexico/mexi32047.jpeg

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